Cuenta contable 678: Definición
Descubre el funcionamiento y los tipos de gastos que pueden registrarse en la cuenta 678, una de las cuentas cruciales para las finanzas corporativas.
Descubre el funcionamiento y los tipos de gastos que pueden registrarse en la cuenta 678, una de las cuentas cruciales para las finanzas corporativas.
La cuenta 678, denominada Gastos excepcionales, tiene un impacto significativo en las finanzas de una empresa. Es como una especie de refugio contable para situaciones peculiares que no encajan fácilmente en otras categorías del grupo 6 o grupo 8 según el PGC (Plan General Contable).
Básicamente, esta cuenta sirve para registrar pérdidas y gastos que salen de lo común y que, debido a su naturaleza particular, no tienen un lugar específico en otras cuentas contables.
En este artículo que te traemos en , te ayudaremos a entender cómo funciona esta cuenta y qué tipo de gastos se pueden incluir en ella para evitar errores y cumplir con las normativas fiscales establecidas por la Agencia Tributaria.
La cuenta 678, conocida informalmente como “la de los gastos extraordinarios o excepcionales”, forma parte del , que aborda las Pérdidas procedentes de activos no corrientes y gastos excepcionales.
Esencialmente, como mencionamos al principio, esta cuenta sirve como receptáculo contable para esos gastos de magnitud significativa que surgen de manera imprevista y no tienen una categoría específica donde encajar dentro de la contabilidad de la empresa.
Son gastos que escapan a lo general, que no forman parte de la rutina operativa y que, por lo tanto, no pueden ser anticipados en la planificación financiera habitual de la organización.
Siguiendo las directrices del Plan General Contable, la cuenta 678 se encarga de contabilizar pérdidas y gastos tales como:
O sea que por su carácter no puedan contabilizarse en otras cuentas del grupo 6, que es de compras y gastos, o del grupo 8, que es de gastos imputados al patrimonio neto.
La distinción entre gastos deducibles y no deducibles en la cuenta 678 es de suma relevancia, ya que la inclusión de un gasto en la misma, denominada gastos extraordinarios, no garantiza su deducibilidad.
Un gasto sólo puede considerarse deducible si está directamente vinculado a la actividad principal de la empresa, independientemente de la cuenta contable en la que se registre.
Por ejemplo, los gastos derivados de incidentes como incendios, inundaciones u otros accidentes laborales serían considerados deducibles, ya que están directamente relacionados con la operación de la empresa.
Sin embargo, aquellos gastos que no guarden una relación directa con la actividad empresarial, como multas y sanciones, no serían deducibles y se pueden contabilizar utilizando una subcuenta dentro de la cuenta 678.
Esta práctica es común en el ámbito contable y permite mantener un registro separado de los gastos que no pueden ser deducidos fiscalmente.
La "cuantía significativa" se refiere al umbral o límite que determina si un gasto debe ser registrado en una cuenta específica o en otra, y corresponde a la discreción de la empresa o del contable determinar qué se considera como tal en cada situación.
Pongamos el ejemplo de que ocurre un gasto poco frecuente: Se extravía por descuido una cantidad mínima de dinero de la caja de la empresa.
En este caso es posible que no sea necesario recurrir a la Cuenta Contable 678 - Gastos Excepcionales, dado que no se considera relevante en el contexto general de las operaciones comerciales de la empresa.
En cambio, podría ser más apropiado utilizar la Cuenta Contable 659 - Otras pérdidas en gestión corriente, la cual abarca este tipo de gastos ordinarios pero considerables para la actividad diaria.
Este cambio en la asignación de cuentas asegura una contabilidad más precisa y adecuada a la naturaleza de los gastos, sin comprometer la transparencia ni la precisión de los registros financieros.
Cada empresa tiene su propio criterio para evaluar si un gasto en particular es valioso y merece ser registrado en una cuenta específica, como la cuenta contable 678 o la 659, ya que no existe una norma estricta que determine qué cantidad tiene que ser estimada como “significativa”.
La cuenta contable 678, conocida como Gastos Excepcionales, desempeña un papel fundamental en la contabilidad empresarial al permitir la correcta clasificación de gastos no periódicos y relevantes. Veamos algunos aspectos clave:
La cuenta contable 678 resulta ser un recurso versátil, aunque su uso suele estar asociado a situaciones inesperadas o adversas que pueden generar preocupación.
Sin embargo, en momentos de necesidad, contar con herramientas para la gestión de estos gastos proporcionan una solución rápida y eficiente.
Digitalizar algunos procesos contables redunda en trámites financieros ágiles y sin complicaciones adicionales, asegurando que cualquier incidente no perturbe demasiado la rutina empresarial.
Consulta en Circula como la digitalización de la contabilidad de tus gastos empresariales puede mejorar el rendimiento de tu negocio.
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